¡Corazones!
Después de ese capítulo tan lleno de emociones que vivimos el domigo, aquí está el teaser del capítulo de esta semana. Los chicos cambian su rutina, aunque los cambios no se aplican para todos. Les dejo el teaser:
Ella asintió de manera vehemente y tomó la mano de su novio para juntos bajar nuevamente por las escaleras. Era cierto que tenía hambre, no había descansado en toda la mañana y sin duda necesitaba recargar energías para lo que restaba del día, por lo que la idea de Edward no le pareció tan mala después de todo. Él le sonrió ante su entusiasmo y la condujo por el pasillo. En cuanto bajaron los dos primeros escalones, una conocida silueta se dibujó al inicio de las escaleras.
Después de ese capítulo tan lleno de emociones que vivimos el domigo, aquí está el teaser del capítulo de esta semana. Los chicos cambian su rutina, aunque los cambios no se aplican para todos. Les dejo el teaser:
Ella asintió de manera vehemente y tomó la mano de su novio para juntos bajar nuevamente por las escaleras. Era cierto que tenía hambre, no había descansado en toda la mañana y sin duda necesitaba recargar energías para lo que restaba del día, por lo que la idea de Edward no le pareció tan mala después de todo. Él le sonrió ante su entusiasmo y la condujo por el pasillo. En cuanto bajaron los dos primeros escalones, una conocida silueta se dibujó al inicio de las escaleras.
– Edward – susurró Rosalie quien en ese momento subía a su departamento. Una ligera sonrisa se dibujó en su rosto y un brillo lejano destelló en su mirada azul. La joven de cabellos de sol suspiró con tal fuerza que creyó que tenía meses sin llenar sus pulmones de aire, sin sentir a su corazón latir, sin sentir a su alma en el lugar donde le correspondía.
Tenía mucho tiempo sin ver a su hermano. La última vez que lo había visto o sabido de él fue aquella mañana cuando abrazados, iniciaron el camino del perdón. Y es que, durante el último año, el único contacto que Rosalie había tenido con su familia había sido vía telefónica, ya que su carrera era tan absorbente, que ella no había podido regresar a casa en todo el año, y eso a pesar de que Forks quedaba apenas a 3 horas de Seattle.
Toda su familia le hacía falta. Echaba de menos a su hermana Alice, necesitaba de sus locuras y sabias palabras. También echaba de menos a sus padres y sus buenos deseos por las mañanas, pero contra todo pronóstico era a Edward a quien extrañaba a rabiar, aunque su orgullo no le permitiera del todo reconocerlo. Extrañaba el sonido tan tranquilo que producía su hermano al tocar el piano, la emoción que brillaba en sus ojos cuando mamá les preparaba pastelitos de chocolate y canela, y la sonrisa torcida que se dibujaba en su rostro cuando estaba contento. Y es que era esa misma sonrisa, la que tanto extrañaba, la que ahora asomaba en sus labios mientras apretaba la mano de su novia, de su amiga de toda la vida, de la joven a la que alguna vez menospreció: Isabella Swan.
Ella sabía por los mails que intercambiaba periódicamente con Alice, que su hermano estaba completamente enamorado de Bella. La consideraba su vida entera y que pronto vendrían a Seattle a estudiar juntos. Se preparó psicológicamente durante semanas para ese momento, para aceptar con tranquilidad que Bella era la persona que su hermano había escogido para él, para decirle con sinceridad que se alegraba por ellos. Pero al parecer aquellas semanas, no habían sido suficientes, al parecer ella aún no estaba lista para ese gran paso.
Su sonrisa se borró al instante al darse cuenta de aquello. Su semblante cambió al segundo, y un gesto de ira en su rostro se dibujó. No era ira contra su hermano, o contra Bella, no…no. Era contra ella misma y aquel estúpido perjuicio que al parecer jamás la dejaría en paz.
– Rosalie – susurró Edward con un tono de voz entre emocionado y sorprendido cuando vio a su hermana que de un momento a otro cambió de la sonrisa a la tristeza. Aunque las heridas entre ellos no habían sanado del todo, su corazón se llenó de alegría al verla. Le había hecho falta, era su hermana después de todo, la pequeña que en antaño lo molestaba cuando hablaba con la boca llena en la mesa, o que se enfurecía cuando él le halaba las coletas recién peinadas. De manera involuntaria él volvió a sonreír, y notó que su hermana no le respondió de la misma manera. Fue en ese momento en que se dio cuenta que Rosalie ya no era la misma chica que había dejado Forks un año atrás. Las cosas habían cambiado para ella ¡Y vaya de que manera! Su mirada era de un azul apagado, su semblante era de tristeza, y su alma sin duda susurraba soledad.
– Hola, Rosalie – dijo con su voz una atemorizada Bella al ver el duelo de miradas de los hermanos Cullen. Rosalie abrió sus ojos de par en par y su boca se abrió como un pececillo en busca de aire.
– ¿Qué…? ¿Qué?...– preguntó Rosalie mientras negaba con fuerza –. ¿Isabella puede hablar? ¿No era sorda acaso? ¿Edward? ¿Qué…? – balbuceó asustada mientras subía las escaleras nerviosa. Edward negó con tristeza y apretó la mano de su amor.
– Hola, Rosalie. ¿Cómo estás? Nosotros muy bien. Sí, mira te cuento, Bella no puede escuchar pero eso no le impide hablar. Sigue siendo “sorda” o lo que para fines prácticos tú consideras un parásito. Espero que tengas buen día, nosotros ya nos vamos – dijo en un rápido monologo Edward mientras bajaba las escaleras y obligaba a Bella a caminar.
– Edward… ¡Espera…!– le gritó su hermana tratando de alcanzarlo, pero él fue más rápido que ella y subiéndose al Volvo despareció de su vista en pocos segundos. Bella, quien no entendía absolutamente nada de lo que estaba ocurriendo, aprovechó la luz roja de un semáforo para poder hablar con Edward.
– ¿Qué pasó…? – le preguntó tomándolo del rostro y obligándolo así a hablar lento para que ella leyera sus labios. Él suspiró derrotado y le susurró.
– Hay algunas cosas en la vida que jamás cambiarán, mi amor… mi hermana, por ejemplo, es una de ellas – finalizó con su voz dolorida y quebrada. Lastimada por el desprecio de alguien tan cercano para él como lo era su propia hermana.
¿Será que no vemos cambios en Rosalie aún? ¿Qué quería decirle que Edward no le permitió? Mas de la historia del silencio este domingo! Hasta eso... ¿me cuentan que les pareció el teaser? ¡Nos vemos pronto!
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